Arquitectura contemporánea
Durante la década de 1980, la arquitectura comenzó a distanciarse de las características posmodernas de eclecticismo e ironía. Los arquitectos empezaron a experimentar con nuevas formas y materiales, impulsados por avances tecnológicos. Aunque algunas obras seguían reflejando influencias posmodernas, surgieron nuevas corrientes que redefinieron la arquitectura hacia finales del siglo.
Título
Años 1980-1990: Transición desde el Posmodernismo
A diferencia de movimientos anteriores como el Modernismo o el Posmodernismo, que tenían un lenguaje visual claro, la arquitectura contemporánea abarca una amplia variedad de estilos y enfoques. La experimentación formal y el uso de tecnologías avanzadas, como la informática y la ingeniería estructural avanzada, se volvieron más comunes.
La introducción de herramientas digitales en la década de 1980 permitió a los arquitectos diseñar y construir formas más complejas y no ortodoxas. El uso de programas de modelado 3D revolucionó el proceso de diseño, permitiendo la creación de edificios que anteriormente eran inimaginables.
Años 1990: Emergencia del Deconstructivismo y nuevas formas
A finales de los años 80 y principios de los 90, el Deconstructivismo se convirtió en una corriente importante dentro de la arquitectura contemporánea. Influenciado por la filosofía del postestructuralismo, este estilo rompía con la idea de que la forma debía seguir a la función, creando edificios con formas fragmentadas, irregulares y aparentemente caóticas.
Los avances en ingeniería y materiales, como el vidrio estructural, el acero y los paneles de titanio, permitieron la creación de formas arquitectónicas innovadoras. Los arquitectos comenzaron a explorar la creación de espacios más fluidos y escultóricos, desafiando las ideas tradicionales sobre la estructura y la simetría.
Años 2000: Enfoque en la sostenibilidad y la arquitectura verde
Durante la primera década del siglo XXI, la sostenibilidad se convirtió en uno de los pilares de la arquitectura contemporánea. La crisis climática y el aumento de la conciencia ambiental llevaron a los arquitectos a diseñar edificios que minimizaran su impacto ecológico. Esto incluyó el uso de materiales reciclados, energías renovables, la incorporación de jardines verticales, techos verdes y sistemas de eficiencia energética.
Los arquitectos contemporáneos comenzaron a incorporar tecnologías avanzadas para la reducción del consumo energético, como sistemas de climatización inteligente, aprovechamiento de la luz natural y sistemas de recolección de agua.
Años 2010: Digitalización y nuevos materiales
A medida que la tecnología digital avanzaba, la arquitectura contemporánea se benefició del uso de algoritmos para crear estructuras complejas y parametrizadas. Los programas de modelado computacional, como el BIM (Building Information Modeling), permitieron a los arquitectos diseñar edificios con mayor precisión y eficiencia.
Los avances en la fabricación digital, como la impresión 3D y la fabricación robótica, abrieron nuevas posibilidades en la creación de formas personalizadas y únicas. Los arquitectos contemporáneos comenzaron a experimentar con materiales como plásticos avanzados, compuestos de fibra de carbono y otros materiales innovadores.
Años 2020-presente: Futuro de la arquitectura contemporánea
La pandemia de COVID-19 ha redefinido las prioridades de la arquitectura contemporánea, dando mayor énfasis a la salud, el bienestar y la adaptabilidad de los espacios. Los diseños ahora se enfocan en crear espacios interiores más saludables, ventilados y multifuncionales, así como en repensar la forma en que los edificios interactúan con el espacio exterior.
Nuevos materiales y construcción ecológica: La búsqueda de soluciones sostenibles ha impulsado la investigación de nuevos materiales de construcción, como el hormigón de baja emisión de carbono, la madera laminada cruzada (CLT), y el uso de materiales reciclados.
Características clave de la Arquitectura Contemporánea
Diversidad estilística: A diferencia de otros movimientos arquitectónicos que se caracterizan por un estilo dominante, la arquitectura contemporánea se define por su pluralidad.
Innovación tecnológica: La arquitectura contemporánea se apoya en tecnologías avanzadas para diseñar y construir edificios más complejos, eficientes y sostenibles. Esto incluye el uso de modelado 3D, algoritmos y fabricación digital.
Sostenibilidad: La preocupación por el impacto ambiental de los edificios ha llevado a la adopción generalizada de principios sostenibles en la arquitectura contemporánea.
Flexibilidad y adaptabilidad: Los edificios contemporáneos son diseñados para ser flexibles, capaces de adaptarse a los cambios en las necesidades de sus usuarios a lo largo del tiempo. Los espacios multifuncionales y las estructuras desmontables son tendencias crecientes en este campo.
Interacción con el entorno: Los edificios contemporáneos a menudo buscan una interacción más fluida con su entorno, integrando el espacio público y mejorando la conectividad urbana.
Arquitectos
Bjarke Ingels
Obras destacadas:
- VIA 57 West (Nueva York, EE. UU., 2016)
- CopenHill (Copenhague, Dinamarca, 2017)
- 8 House (Copenhague, Dinamarca, 2010)
Herzog & de Meuron
Obras destacadas:
- Tate Modern (Londres, Reino Unido, 2000)
- Beijing National Stadium (Nido de Pájaro) (Pekín, China, 2008)
- Elbphilharmonie (Hamburgo, Alemania, 2017)
Tate Modern y el Nido de Pájaro combina una estructura masiva con un sentido de ligereza y transparencia.
